La windsurfista andaluza, top ten mundial de la clase iQFoil, afronta este domingo las primeras pruebas en aguas de Marsella, una regata maratón de valor doble y dos mangas, rumbo a la lucha por las medallas del viernes 2 de agosto.
Este domingo, 28 de julio, Pilar Lamadrid hará realidad su sueño olímpico con su estreno en la competición de la clase iQFoil de los Juegos de París. A sus 27 años, la windsurfista sevillana afincada en El Puerto de Santa María debutará en las aguas de Marsella con la esperanza de acceder a la lucha por la gloria en forma de metal el próximo 2 de agosto. Por delante, cinco jornadas y un máximo de 19 mangas previas esperan a la regatista del Club Náutico Puerto Sherry, que ha alternado durante los últimos meses sus entrenamientos entre el campo de regatas de los Juegos y la Bahía de Cádiz a las órdenes del técnico balear Mateo Sanz.
Por palmarés y tras completar todo el ciclo olímpico en el top ten del ranking internacional, que llegó a liderar durante nueve meses, la andaluza está llamada a pelear por un puesto en el podio de la nueva disciplina olímpica de las tablas. De ello da fe el quinto puesto logrado en el Campeonato del Mundo de principios de año en aguas de Lanzarote, resultado que ya consiguiera en el año 2022 e incluso superara un año antes al ser cuarta, en los tres casos cayendo en las semifinales de la denominada Medal Series.
En los Juegos, Pilar Lamadrid, que cuenta con varios podios internacionales y ha sido quinta, sexta y octava en Campeonatos de Europa, tendrá que enfrentarse a una flota formada por sólo 24 regatistas, frente al casi centenar de cualquier competición internacional. Entre sus rivales, las principales aspirantes a las medallas serán la israelita Sharon Kantor, vigente campeona del mundo; la británica Emma Wilson, plata y bronce en las dos últimas citas mundialistas; la francesa Helene Noesmoen y la italiana Marta Maggetti, campeonas en 2021 y 2022; o la noruega Mina Mobekk, que cuenta con un título europeo.
El peculiar formato de la competición deja abierta las opciones a cualquier sorpresa, ya que las diez primeras de la clasificación general accederán en la jornada final a la Medal Series. En la misma, la vencedora de la primera fase se asegurará medalla y esperará rivales para la lucha por las tres preseas, que saldrán tras unas semifinales que disputarán la segunda y tercera clasificadas frente a las dos primeras de los cuartos de final, a disputar igualmente en el cierre de la competición entre la cuarta y la décima de la general.
Previamente, la competición se iniciará este domingo con una manga de fondo o maratón de valor doble y hasta 90 minutos de duración a la que seguirán dos pruebas más en formato sprint slalom o barlovento/sotavento, según las condiciones del viento. Y de lunes a jueves, el programa de la primera fase se completará con cuatro mangas por día, a definir según la meteorología.
Según la normativa, la serie clasificatoria ha de contabilizar un mínimo de seis regatas, que en el caso de no completarse pospondría la Medal Series para el día de reserva. Y en cuanto a los descartes, tres como máximo durante toda la competición durante la primera fase, se aplicará el primero tras la tercera regata, un segundo cuando se hayan navegado ocho y el tercero al llegar a la decimosexta manga.
CUARTA REPRESENTANTE DEL WINDSURF ANDALUZ
Pilar Lamadrid recoge en los Juegos de París el testigo en el windsurf olímpico andaluz de Mª Carmen Vaz, que lograra el diploma en Sidney 2000; Blanca Manchón, diploma en Atenas 2004 y 11ª en Tokio 2020; y la también sevillana Marina Alabáu, campeona olímpica en Londres 2012 después de rozar la medalla en Pekín 2008 con un cuarto puesto y acariciar su segundo metal olímpico en Río 2016, donde fue quinta en su despedida olímpica.
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