Ha logrado su primer objetivo, afrontar el Mundial con la tranquilidad de despejar su futuro y saber que a partir de ahora defenderá la camiseta del Unicaja. Es un guerrillero de las canchas, el jugador que todo técnico quiere en sus filas, el mejor situado siempre en los rebotes Carlos Jiménez sabe lo que es ganar medallas y busca ahora colocar a España en lo más alto del podio de Japón.
¿Cuáles son tus primeros recuerdos de la selección española?
Pues supongo que son de Los Angeles 84 o del Mundobásket de España 86, tenía yo 8 o 10 años. Quizás más el segundo porque veníamos ya con el éxito de los Ángeles y fue un poco el boom del baloncesto español y estaba todo el mundo como más enganchado.
¿Y tu mejor momento con la camiseta nacional?
Quizás me quedaría con la medalla Europea que conseguí en París en 1999. Ya veníamos de unos años malos y fue un campeonato que nos metimos de rebote en cuartos, que conseguimos ganar a Lituania que era el equipo favorito y estaba aún Sabonis jugando y fueron muchísimas emociones. Guardo un recuerdo entrañable de aquel año.
¿La ilusión es añadir más momentos así a tus recuerdos?
Todavía me quedan unos años y a lo mejor vendrán momentos objetivamente mejores como lograr una medalla de oro, porque no tengo ninguna, pero es que aquel año fueron muchísimas emociones, hubo muchísimos sentimientos, y no sé si volveré a vivir otro momento tan bueno.
¿Es un buen año para alcanzar esa medalla de oro?
Ojalá. Hay mucha ilusión desde el primer día por nuestra parte y por todo lo que hay alrededor. Lo que ocurre es que tenemos que ser cautos también. Sabemos que estas expectativas que estamos creando pasan porque nosotros compitamos al máximo. Sabemos que va a haber factores en el campeonato que no vamos a poder controlar y esperemos que estén de nuestra parte. Pero lo que nosotros podemos controlar que es competir e ir al máximo eso tenemos que hacerlo todos los días.
¿Es contraproducente toda la euforia que se ha creado a vuestro alrededor?
Es fruto también de los buenos últimos años de la selección. Se van consiguiendo cosas, la gente se va creando expectativas, los medios cada vez están más pendientes de nosotros, cuanto más hablan los medios más mueven a la gente y es una bola que no puedes parar. Nosotros estamos encantados de despertar esa ilusión en la gente pero esperamos que tampoco se nos convierta en un exceso de presión.
Con respecto al fútbol, la gente decía que España no supo competir. ¿La selección de baloncesto sí sabe?
Llevamos mejores resultados comparando los últimos años con respecto al fútbol, pero ése también es un deporte muy distinto, cada vez es más espectáculo y menos deporte y supongo que también será más complicado centrarse por todo lo que se mueve alrededor. Espero que no- sotros gocemos de la tranquilidad suficiente como para no llegar a esas alturas porque no quiero que se pierda el espíritu de lo que es el campeonato y el baloncesto en general.
