Todos lo negarán, todos mirarán hacia otro lado cuando les hablen de la Copa Príncipe pero superado el ecuador de la primera vuelta unos cuantos equipos empiezan a mirar de reojo ese primer gran objetivo de la temporada. La Copa está en horizonte y desde hoy hasta el final de primera vuelta cada partido se convertirá en un paso adelante, o hacia atrás, en búsqueda del éxito. Tras la novena jordana empiezan los cálculos De momento, trío de cabeza con Alerta (7- 1), León y L´Hospitalet (6- 3). Tras ellos, diez equipos separados por una victoria.
Nuevo golpe de Alerta Cantabria. Nueva victoria de esas que tiene valor doble. Nueva reafirmación de aspiraciones, de aumento de autoestima. El equipo de Pablo Laso va lanzado y supera una tras otra las pruebas a las que le somete la competición. En Palma fue capaz de superar a un rival mermado por las lesiones pero convencido de poder ganar. Superó a un Lewis extraordinario - 29 puntos y a un conjunto local que, curiosamente, valoró más al término del partido. Pero la defensa, una de las virtudes del equipo cántabro, y el buen equilibrio en la aportación de todos los jugadores, destacando el veterano Galilea (4 de 7 en triples), le llevó a vivir los últimos segundos con opciones y conseguir volverse de Mallorca con una victoria que vale su peso en oro (71- 72)
Y donde también se vivió algo importante fue en L´Hospitalet. Ahí sí saltó la banca porque si bien la victoria local entraba en los pronósticos, nadie podía imaginar que el luminoso contemplaría un marcador final semejante. 101- 73 con una exhibición local que puso patas arriba el Compleix de L´Hospitalet Nord. Llevaba semanas avisando el grupo de Mateo Rubio y un partido a priori equilibrado, jóvenes valores nacionales explotaron todo su talento. Fornás (17 puntos y 16 rebotes), Arco, Forcada, Puyada (esta vez 12 asistencias) lo bordaron sin necesidad de ayuda extranjera ya que Diene apenas jugó y Terrell lo volvió a ver desde la banda.
TENSIÓN EN CANARIAS
Tensos descansos en Canarias. En el vestuario del Ricoh Manresa se podía cortar la tensión viendo como tras el segundo cuarto el luminoso señalaba un más que inquietante 39- 34 para los locales. No están para bromas en Manresa y Oscar Quintana empieza a conocer la presión de ganar en la LEB. Tuvo el Manresa en Rafa Martínez ese jugador que nunca se arruga en los momentos más delicados y se echó el equipo a las espaldas liderando la victoria fraguada en la segunda parte. Al final 76- 82.
Y si en La Palma la tensión al descanso era visitante, en Tenerife un entrenador empezaba a tener ese sudor frío que ataca a los condenados. Miradas perdidas, gestos de preocupación y drama generalizado de un Tenerife que perdía 31- 41 y se metía directamente en el camino del abismo yendo hacia la sexta derrota consecutiva. En frente, nada menos que un Breogán herido. Experto rival el equipo lucense y entre la calidad y la necesidad, escepticismo local durante los quince minutos de descanso. Pero de pronto, el milagro. Reacción local y todo aquello que hasta este momento se tornaba imposible, salía por fin. Extraordinaria segunda parte del Tenerife convirtiendo en oro cada ataque y endosando al exACB un parcial de 52- 35 para un definitivo 83- 74. Traspaso temporal de una crisis que viajó en el avión hacia Galicia.
VICTORIAS VISITANTES
El Melilla acabó con la racha victoriosa del CAI y con su victoria en Zaragoza (74- 85), tercera consecutiva, no solo escapa de los puestos incómodos de la clasificación sino que se coloca en ese grupo de diez equipos separados por un resultado y que tienen tantas posibilidades de meterse en la cabeza como de irse para abajo. De nada el sirvió a los locales dominar el rebote. Su bajo porcentaje en tiros de tres y en tiros libres (demasiada presión) le condenó ante un Melilla trabajador, intenso y efectivo.
Y en Los Barrios sorpresa relativa. Porque ya avisábamos que el nivel de juego de Burgos no se correspondía con su lugar en la clasificación y porque cuando en un equipo se juntan dos tipos como Smith y Lo Grippo puede pasar de todo. Entre los dos, 60 puntos. También sucedió algo en ese vestuario visitante para conseguir la máxima eficacia en un tercer cuarto de libro (13- 26 de parcial) que abrió el camino de la victoria final (81- 92).
Inca pasó por Gandía como un vendaval y se llevó por delante todo lo que encontró. Salió el conjunto balear dispuesto a romper pronto el debate y con un Page nuevamente estelar se marchó en el marcador de tal manera que los locales tan solo pudieron intentar maquillarlo en el último cuarto (75- 87).
Y en Tarragona fue imposible repetir proeza por parte de los locales y un León más efectivo que efectista se llevó el partido basándose en buena defensa y control del ritmo. Aguantó por delante en el marcador el conjunto local, con el joven Marcus Vinicius, pronto español, destacando en anotación y en rebotes. Pero la buena labor de Urko Otegui y el francés Dumas llevó a León a ir nivelando la contienda. La mayor profundidad de banquillo en el grupo de Aranzana le permitió vivir el último cuarto con más oxígeno y con ello, más ideas. Al final, victoria visitante que le deja en el trío de cabeza (66- 77).
En el último partido de la jornada, el Lleida de Edu Torres consiguió una victoria balsámica en Huelva que le permite compartir lamentos con otros cuatro equipos que están con tres victorias en la cola de la clasificación. Lejos de Barris Nord, el conjunto catalán se mostró menos presionado, más solvente y dominó de principio a fin en el marcado (63- 70).