Los cementerios y las sepulturas son en último término un reflejo más de la ciudad de los vivos. Berallat nos propone un modelo de jardín funerario mediterráneo y clásico, ligado a la tradición y a la cultura popular. Un cementerio antiguo bien conservado o restaurado es un “espacio artístico” con frecuencia ignorado por la sociedad.

El color

Hay dos colores básicos, el blanco de los mármoles y el verde de los vegetales. El negro es el color propio del luto en nuestra cultura. El verde es el emblema de la regeneración primaveral y por ello simboliza “ la inmortalidad del alma”. En la botánica funeraria predominan las “hojas” sobre las “flores”. La hierba verde equivale a “esperanza y juventud”. Se deben plantar árboles y arbustos de hoja perenne.

Cipreses y palmeras

La rama del ciprés era señal de luto en las casas durante la época clásica. Imprime seriedad y reposo. Mira a la región de la luz en contraposición con la oscuridad.

Las palmeras son el símbolo de la renovación, representación de la victoria y del triunfo sobre el espíritu del mal y el triunfo de la vida y de la recompensa eterna. Las palmeras son emblema de “inmortalidad”.

Ausencia de fruto

No debe haber ni palmeras ni árboles con fruto. Los olivos especialmente excluídos. La hierba que sale debe quemarse ya que ha sido alimentada con despojos humanos.

Paz

La tranquilidad, quietud y reposo del espíritu que deben predominar en el Campo Santo se traduce en la ausencia de plantas espinosas. Las “cañas” son muy adecuadas por su esbeltez de tallos y hojas y no dan fruto. La cizaña ( Lolium temulentum ) está excluída de los cementerios.

Simbólica de la humildad

Lo severo y lo solemne se manifiestan por medio de árboles de cierta elevación, especialmente rectilíneas. Lo humilde se manifiesta por medio de la hierba. La hierba simboliza según Teodulfo de Orleáns el eterno verdor del Paraíso. El musgo es aconsejable en rocas y troncos. La hiedra es una planta muy conveniente, simboliza el cariño avasallado y humildoso. Simboliza el abrazo que se dan la vida y la muerte.

Entre las florecitas más indicadas está la “violeta” que es emblema de la humildad y la modestia.

Distintos tipos de cementerios en pueblos y comunidades menores:

El cementerio mediterráneo.

El cementerio que denominamos “mediterráneo” tiene un especial encanto y es propio de pequeños pueblos costeros o próximos a la costa que raramente sobrepasan los 50.000 habitantes,

Es un espacio que se caracteriza por la utilización de “nichos” superpuestos. Este diseño obedece normalmente a la falta de espacio y a la necesidad de crecer en altura y no en extensión. Cuando en tramos en estos recintos solemos encontrar un patio o espacio de acceso que sirve de distribuidor y nos permite dirigirnos en todas las direcciones. Tiene pocos árboles, normalmente “cipreses” y estrechos parterres longitudinales en los que encontramos plantas trepadoras como “buganvillas”. La espectacularidad de este tipo de cementerios reside en la multitud de pequeños maceteros, vasijas en las que se depositan flores artificiales. Suelen tener algunos bancos, papeleras y algún macetero.

El cementerio norte- americano.

Es un cementerio muy extenso al que se accede a su interior en coche. Está dividido en calles y parcelas en las que se ubican en el terreno las tumbas. Las tumbas están alineadas formando calles entre sí. Básicamente son una gran pradera “verde” cuyas calles y límites están marcados por alineaciones de cipreses y palmeras. En las zonas del sur suelen contar con una instalación de riego que permite que la pradera esté verde durante todo el año.

El cementerio centro- europeo.

Es un cementerio en extensión muy parecido al mediterráneo en el que se combinan los nichos y las tumbas. Las tumbas suelen tener maceteros con flores vistosas y es frecuente encontrar numerosas esculturas alegóricas. El acceso suele ser un camino con una alineación de cipreses a ambos lados del camino y pequeñas superficies de pradera en el interior dispersas en pequeños parterres. Solemos encontrar numerosos setos de coníferas cubriendo las paredes vacías.

Conservación y mantenimiento de cementerios

Podemos afirmar que la conservación y el mantenimiento de las plantaciones de los cementerios es similar al de un parque o una zona ajardinada local. Tiene algunas particularidades entre las que destacamos el manejo de restos vegetales procedentes de las plantas cultivadas directamente en el “suelo vegetal” y por lo tanto están en contacto directo con restos orgánicos de varias generaciones de difuntos. Se recomienda dar un tratamiento específico para estos restos vegetales, de tal manera que se haga honor a su procedencia deben ser incinerados o reincorporados al terreno natural de cementerio.