El piloto sevillano Manu Bejarano, líder intocable de la recién creada Copa Fórmula Futuro, con seis victorias en otras tantas carreras, sigue ganando adeptos para la causa con vistas a su consolidación definitiva en el mundo de los monoplazas después de abandonar este año el karting. Uno de los últimos en hacerlo es el madrileño Máximo Cortés, actual piloto de las Le Mans Series y que desde hace varias semanas se está encargando de asesorar, a modo de coach personal, al hispalense, una de las sensaciones de la temporada automovilística nacional.
El ex campeón de España de Fórmula 3, que se desplaza a cada meeting o test con Manu cuando su calendario personal se lo permite, lo tiene claro a la hora de valorar las opciones de su joven discípulo, que el próximo 2 de agosto cumplirá los 16 años. Y es que desde que entrara en contacto con él en la Escuela de Emilio de Villota, en la que es monitor, se interesó por seguir de cerca las evoluciones de esta promesa. Desde la primera vez que lo vi me di cuenta de todo el potencial que tiene. Es un buen chaval, que está bien asesorado pero que necesita toda la ayuda posible. Y cada vez que puedo le ayudo con mi experiencia.
No lo duda Cortés a la hora de apostar como básico en la carrera de Manu Bejarano que dé el salto la próxima temporada a la Fórmula BMW Europea. Y más viendo la superioridad con la que se ha manifestado en la Copa Fórmula Futuro, incluida en el calendario del Campeonato de Cataluña de Velocidad. Por ahora sólo ha hecho introducirse, y a nivel nacional, pero lo lógico, por su calidad, es que corriera ya a nivel europeo. Y es que sólo en esta exigente competición para jóvenes valores, entiende el madrileño, podrá verse exactamente el nivel al que está Manu. Tiene que cambiar de parrilla y competir con una veintena de pilotos de calidad, incluso algunos de su edad. Es lo suyo
Eso sí, un factor tan primordial como el de los patrocinadores se antoja vital para que esta historia prosiga, como de momento, con el pedal a fondo para los intereses de Manu Bejarano, que baraja varias opciones incluso con vistas al final de esta temporada. Los meeting de la Fórmula BMW Europea coinciden con los de la Fórmula 1, lo que eleva su coste pero es al mismo tiempo el mejor escaparate posible. El esfuerzo merece la pena, porque de hecho hay compitiendo pilotos encuadrados en programas con equipos de F1, como Red Bull, apunta Máximo Cortés, que avisa del esperanzador futuro que se atisba al final de recta para este joven sevillano del barrio de Montequinto.
Espero que Andalucía se entere de que tiene un piloto de garantías para ya mismo. El primer año es para conocer los circuitos, hacer test, kilómetros e intentar hacerlo bien y subir al podio en alguna prueba. Pero el segundo año es para ir a ganarlo, porque al fin y al cabo los títulos son lo que valen y llaman la atención. Y Manu debe estar ahí.