PERIODISTAS EXPLORADORES Y RAÚL GONZÁLEZ BLANCO
Vilnius, capital de Lituania, amanecía hoy gris y lluviosa. Por primera vez desde que comenzara la concentración de la Selección hace ya más de un mes, en la ciudad en la que se encuentran jugadores y cuerpo técnico el parte meteorológico no viene acompañado de sol y altas temperaturas.
Teniendo en cuenta que Sergio Scariolo había dado la mañana libre a los internacionales, sólo había dos maneras de enfrentarse al mal tiempo: quedarse en el hotel viendo llover o salir a dar un paseo por Vilnius.
La primera opción ha sido la que ha preferido el grupo de jugadores españoles, que han aprovechado que su despertador hoy sonaba un poco más tarde de lo habitual para descansar, escuchar música, ver alguna película y jugar alguna que otra partidita a la play.
El hotel en el que la Selección se aloja está ubicado en la frontera que separa la zona moderna y la antigua de Vilnius. Así, desde las habitaciones, los chicos de la absoluta han podido disfrutar viendo a un lado modernos edificios y al otro el casco histórico de la capital lituana. El cuerpo técnico español no se ha contentado con las vistas desde la ventana y ha aprovechado la mañana para pasear por la lluviosa capital que, además, este 2009 era designada capital europea de la cultura.
Antes del almuerzo, hora a la que la expedición española al completo estaba citada para reunirse de nuevo, tan sólo tres personas han tenido algo de trabajo: los fisios de la Selección, Kiko Lacomba y Paco Fernández, y Juan Carlos Navarro. Los primeros han estado aplicando diferentes tratamientos a algunos jugadores, mientras que el capitán de la Selección ha tenido una visita algo especial. Hasta el hotel en el que se alojan los jugadores en Vilnius llegaban dos aficionados vestidos con su camiseta del Barcelona a la caza de la rúbrica del catalán. Además de firmarles, Juan Carlos se hizo fotos con estos dos chicos lituanos que, a partir de hoy, presumirán por todo Vilnius de tener la camiseta firmada de uno de los mejores jugadores de Europa.
Después de comer, era turno de sacarse una foto con los empleados del hotel y entregar una camiseta de Pau Gasol firmada por todos los jugadores de España. Tras la siesta, el equipo salía en dirección a la cancha del Lietuvos Rytas, pabellón de tan sólo 1.000 espectadores y en cuyas paredes cuelga la historia del club lituano. Así, en su camino hacia el parqué la expedición española ha podido ver imágenes de algunos de los ilustres jugadores que han pasado por la disciplina de este club: Jasikevicius, Siskauskas, Macijauskas, Jasaitis, Petravicius, Lukauskis y otros muchos que ocupan lugar de honor en este pabellón lituano.
A este entrenamiento hubo un pequeño grupo que llegó un poco más tarde de lo previsto: el de los periodistas españoles desplazados hasta Vilnius. Cuando se viaja a un país como Lituania y no se ha hecho el reglamentario curso intensivo de lituano no queda otra que fiarse de la gente del lugar a la hora de pedir explicaciones para ir a algún sitio. Así, estos cuatro magníficos bajaban del taxi que, teóricamente, les había dejado en el pabellón en el que entrenaba la Selección y se encontraban en medio de un poco acogedor descampado. Tras marcharse el taxista, los periodistas hablaban con el jefe de prensa de la Selección, Roberto Hernández, que les indicaba el camino hacia la cancha. Las directrices muy sencillas: ir campo a través hasta toparse con él. Afortunadamente, para aquel entonces ya había dejado de llover.
Tras terminar de entrenar, los jugadores salían del pabellón y se encontraban con una tremenda flota de coches que, lamentablemente, no era para ellos. Se trataba de los vehículos oficiales personalizados de los jugadores del Lietuvos Rytas, que se encuentran allí aparcados a la espera de la llegada de los que serán sus dueños la próxima temporada.
La expedición española regresaba ya de noche al hotel de concentración y, como de costumbre, al entrar volvieron a pasar por delante de una de sus piezas más admiradas. Se trata de una camiseta que se encuentra enmarcada en el hall del hotel y que está firmada por el ex-jugador de la selección nacional de fútbol Raúl González Blanco.
Parece ser que España ya no es sólo sinónimo de paella y toros, sino que para los lituanos España también significa deporte, significa fútbol, significa baloncesto y, a buen seguro, que dentro de poco comienzan a hacerse caminatas campo a través emulando a los periodistas exploradores españoles. Hay que ver cómo creamos tendencia.
Más información en feb.es