Poco ha tardado Tom Cruise en incorporarse a las tradiciones de Sevilla, ciudad donde desde hace unas semanas se encuentra rodando las escenas de su última película con Cameron Díaz, Knight and Day. Tras una intensa jornada de grabación, la estrella norteamericana y todo el equipo de producción tuvieron que hacer una pausa forzosa para ceder el espacio a un cortejo procesional de vuelta a su parroquia, lo que permitió al actor presenciar en vivo el paso de una virgen, banda de música incluida, y compartir devoción con decenas de sevillanos que repartían sus loas entre el actor y la imagen religiosa.
Todo sucedió a media mañana en pleno centro de Sevilla y junto a la iglesia de San Román, que no es nueva en esto de atraer famosos al ser la sede de la hermandad de Los Gitanos y uno de los centros de fervor de la Duquesa de Alba. Aprovechando el día festivo, el equipo de rodaje había previsto rodar en dicha plaza para no interrumpir en exceso el tráfico, pero no contaban con que se trataba de uno de los puntos previstos en el recorrido de vuelta de Maria Auxiliadora Coronada, una procesión organizada por la comunidad de Salesianos que reside en el barrio.
Cruise seguía con la escena de su persecución en moto en mitad de un encierro y rodeado por corredores vestidos de pamplonicas, que repetían carrera una y otra vez a un lado de la plaza mientras que por el otro desfilaba el cortejo religioso. Finalmente, el equipo de grabación hizo un alto en el camino para no perturbar la procesión y los atónitos fieles vieron cómo la estrella norteamericana se acercaba para observar todo el ritual con atención. Alguno incluso se preguntó si el actor no echaría en falta los aires falleros que, según reflejó en Mission: Imposible 2, suelen acompañar a las procesiones españolas. La presencia del artista copó parte del protagonismo de los devotos, que no sabían si mirar a la virgen o al actor.
Piropos
También los gritos fueron a partes iguales, y Cruise recibió no pocos «guapo» mientras duraba la procesión. Al término de la misma, el actor no dudó en agradecer tanta pasión y se acercó a saludar a varios fans, que aprovecharon para hacerse fotos con la estrella hollywoodiense. Poco después aparecía en escena su partenaire, Cameron Díaz, que también se llevó su ración de piropos por los vecinos que presenciaban el rodaje en los edificios que rodean la plaza. El equipo de Knight and Day tiene previsto continuar rodando en la capital andaluza hasta dentro de dos semanas al menos, según los planes avanzados por la productora contratada en España. Hasta el momento, además de la persecución en medio de los sanfermines, se han rodado escenas con el tren Al Andalus Expreso, una joya ferroviaria de estilo Belle Epoque que, para la ocasión, llegaba a una estación de Sevilla-Santa Justa irreconocible tras ser ambientada como la terminal de la ciudad austriaca de Salzburgo. La grabación se trasladará en los próximos días al entorno monumental de la ciudad, junto a la Catedral y la Giralda y que sí aparecerán identificadas en el montaje final de James Mangold. Mientras tanto, ambos actores protagonistas disfrutan en sus ratos libres de paseos para conocer los lugares más emblemáticos de la ciudad hispalense, en alguno de los cuales se ha podido ver a Tom Cruise acompañado de su mujer, Katie Holmes, y su hija pequeña, Suri, vestida con un tradicional traje de flamenca de color rosa