El torero ha sido sometido a una operación de casi siete horas. El matador de toros José Ortega Cano ha sido operado en la mañana del martes de la fractura del tobillo izquierdo que padecía tras el grave accidente sufrido el pasado 28 de mayo. La operación ha durado casi siete horas , y, en principio, el resultado ha sido satisfactorio. Así lo ha comunicado el hermano del matador Paco Ortega 'Ha salido todo bien, la operación ha consistido en la fijación de las fracturas del tobillo izquierdo y también del femur. No se le ha realizado traqueotomía, quizá lo hagan mañana o pasado, porque tienen que retirar el tubo y limpiar toda la zona. Afortunadamente no ha existido ninguna anomalía durante la intertenvención'. La intervención quirúrgica a la que fue sometido el matador de toros y ganadero José Ortega Cano del tobillo izquierdo, se saldó con éxito. Finalmente, el equipo médico que atiende al torero se decidió, vista la buena evolución en cuanto a fiebre que ha ido desapareciendo en los últimos días y a la superación de la afección pulmonar, intervenir en esta zona. Sobre todo, porque desde el pasado lunes ya no necesitaba de diálisis. Todo ello propició que se adelantase esta delicada y complicada intervención para reconstruir y fijar el tobillo izquierdo, seriamente dañado en el accidente de tráfico.. Entró en el quirófano poco antes de las nueve y media de la mañana y salió al filo de las cuatro de la tarde y la operación consistió primordialmente en la fijación de las múltiples y graves fracturas que el torero tenía en el citado tobillo izquierdo. En la intervención también se procedió a fijar el fémur, que ya fue tratado en la primera de las operaciones, y se le quitó un clavo que se había colocado en dicha intervención, entre la rodilla y el fémur, no existiendo ninguna anomalía a pesar de la duración. Asimismo, por el momento no se le ha realizado una traqueotomía, como en un principio se pensó, ya que los médicos que le atienden consideran que el torero lleva demasiado tiempo intubado. En todo caso, la familia, por lo que le han comentado los médicos, cree que la traqueotomía se le realizará al diestro en próximas fechas. Tanto los familiares del diestro como los médicos aseguran que Ortega Cano se encuentra estable dentro de la gravedad, lo que le hace permanecer desde que tuvo el accidente en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital sevillano, en el que ya tuvo que ser operado en una ocasión para frenar las fuertes hemorragias internas que sufría. Durante la pasada semana se le comenzó a retirar parte de la sedación al torero, que se encuentra en un estado de coma inducido. Sin embargo, se mantuvieron todas las precauciones cuando el estado de salud de Ortega sufrió una importante crisis, el pasado jueves.
El juez ordena a Toxicología analizar la sangre de Ortega Cano en busca de droga o alcohol
El Juzgado de Instrucción número 9 de Sevilla que investiga el accidente de tráfico saldado con un fallecido y en el que se vio implicado el exmatador de toros José Ortega Cano ha ordenado al Instituto Nacional de Toxicología que analice la muestra de sangre perteneciente al ganadero al objeto de determinar si en la misma hay restos de alcohol, droga "o cualquier otra sustancia que pudiera haber influido en su conducción". En rueda de prensa, el fiscal coordinador andaluz de Seguridad Vial, Luis Carlos Rodríguez León, ha explicado que, a instancias de la Fiscalía, el juez instructor solicitó al Hospital Virgen Macarena, donde se encuentra ingresado el extorero, que, en el caso de que existieran, guardara muestras de la sangre extraída "con finalidad terapéutica" a Ortega Cano antes de las transfusiones a las que fue sometido, todo ello al objeto de "analizarla si fuera necesario como medio de prueba". Tras ello, según ha precisado Luis Carlos Rodríguez León, el centro hospitalario contestó que quedaban algunas muestras de sangre y las mismas se pusieron a disposición del Juzgado instructor, que ha ordenado al Instituto Nacional de Toxicología que analice las mismas "para determinar si hay restos de alcohol, drogas o sustancias que pudieran haber influido en la conducción", lo que también se ha hecho con el propio fallecido en el siniestro, Carlos Parra. Del mismo modo, el fiscal de Seguridad Vial ha señalado que, por el momento, lo que existe es un atestado inicial realizado por la Guardia Civil de Tráfico que acudió al lugar del accidente, la A-8002 en Castilblanco de los Arroyos, en el que "se describen someramente los hechos ocurridos" y en el que "no hay ningún dato de carácter técnico importante ni relevante, ya que esa no es la función de los primeros agentes". "Lo primero es la vida de las personas y la seguridad de la vía, y después la exigencia de responsabilidades penales si las hay", ha apostillado. "da exactamente igual el nombre del implicado" Al hilo de ello, ha dicho no entender "esa presión que tienen algunos con que se le practique o no la prueba de alcoholemia a una persona que está muy gravemente herida", añadiendo que "lo primero es intentar salvarle la vida, no saber si es o no responsable" del hecho en sí. En este punto, ha destacado el trabajo realizado por el Instituto Armado, "que no ha dejado de trabajar desde el primer momento" y se encuentra elaborando el informe técnico para descartar, entre otros aspectos, "que se hubiera producido una avería mecánica". "Se está haciendo todo lo que se suele hacer habitualmente en un accidente, en este caso concreto no se está haciendo nada extraordinario y nos da exactamente igual el nombre de la persona implicada", según ha proseguido Luis Carlos Rodríguez León, quien ha agregado que, "socialmente, puede tener la repercusión que tenga, pero desde el punto de vista profesional se está tratando como cualquier otro accidente y se seguirán los mismos trámites, con las mismas exigencias y protocolos que se han hecho siempre". Según ha insistido, "se sabe que hubo un accidente de circulación y que hubo invasión del carril contrario, pero no sabemos en qué proporción". "Eso es lo que se sabe a ciencia cierta y con datos reales en la mano, pero en lo demás que se ha dicho hay mucha elucubración y muy poco sentido común", ha asegurado, al tiempo que ha dicho que si el accidente ha sido fortuito "no habrá nada" judicialmente hablando, mientras que si "ha habido una imprudencia leve por una parte o por las dos, habrá un juicio de faltas". En el caso de que la imprudencia haya sido grave "o concurra cualquier otro tipo de delito de los previstos en el Código Penal", se celebrará un juicio en los juzgados de lo Penal o en la Audiencia Provincial. "Todo depende de los aspectos técnicos, que son al final los que arrojan luz sobre un asunto como este", ha dicho refiriéndose al informe técnico que está realizando la Guardia Civil y que será remitido en las próximas semanas al juzgado instructor.