El equipo andaluz consiguió en la noche de ayer una victoria muy importante que le sirve para colocarse quinto en la clasificación liguera.
El partido empezó muy bien para el equipo local, el Racing de Santander, ya que dispuso de dos buenas oportunidades para adelantarse en el marcador. La primera fue de Adrián González, que inexplicablemente remató de cabeza cuando tenía todo para acomodarse el esférico con un control e intentar batir a al meta Willy Caballero.
La segunda oportunidad clara para los cántabros fue para Álvaro González, en un córner, pero el central racinguista demostró no ser un killer dentro del área.
A partir de ahí, el Málaga se fue haciendo dueño y señor del partido, arrinconando poco a poco al equipo de Héctor Cúper.
Al descanso se llegó con el resultado inicial y ya en la reanudación el equipo de Pellegrini demostró que quería volver a conseguir una victoria fuera de casa, circunstancia que no se daba desde la jornada cuatro cuando vencieron en las Islas Baleares al Mallorca.
Isco adelantaría a los malagueños en la segunda parte, después de una buena acción de Seba Fernández. El segundo gol vino en una falta lateral botada por Cazorla que Álvaro González, intentando despejar, metió en su propia portería.
Parecía que el partido estaba acabado, pero una buena jugada del joven Julián Luque sirvió para que Stuani asistiera a Arana que no se puso nervioso delante del guardameta y acortó distancias en el marcador.
A falta de dos minutos para el final del choque, Seba Fernández culminó una contra para cerrar el partido y conseguir los tres puntos.
El Málaga se coloca quinto en la clasificación y se mete de nuevo en la lucha por los puestos europeos, mientras que el Racing de Santander tendrá que pelear por no descender a la división de plata del fútbol español.
Foto: malagacf.com