UNICEF instó un inmediato cese de la violencia contra los niños en las provincias del sur de Tailandia, donde una niña de 11 meses falleció el martes junto a otras cuatro personas en un ataque a una tetería en la provincia de Narathiwat.
Bijaya Rajbhandari, Representante de UNICEF en Tailandia, se refirió a los asesinatos como un acto trágico, sin sentido e inaceptable e hizo un llamamiento a todas las partes involucradas a utilizar todos los medios disponibles para poner fin a la violencia y garantizar que todos los niños están protegidos.
La niña, Infani Samo, fue asesinada el martes por la mañana cuando unos hombres armados tirotearon una tetería en el distrito de Narathiwat Rangae. Más de 50 niños han sido asesinados y unas 340 personas han resultado heridas en las provincias del sur de Tailandia desde el resurgimiento de la violencia en enero de 2004. En total, más de 5.000 personas perdieron la vida como resultado de la violencia.
A finales de octubre de este año, un niño de 11 años falleció junto a su padre cuando unos hombres armados dispararon a su camioneta en el distrito de Yala Raman.
Cada vez que un niño es asesinado o herido, cada vez que un niño pierde a un progenitor o pariente, y cada vez que sus escuelas y profesores son atacados, más niños del sur sufren, dijo Rajbhandari. Poner fin a la violencia es la única manera de garantizar que los derechos de todos los niños del sur están totalmente protegidos y respetados.
Acerca de UNICEF
UNICEF trabaja con equipos estables y profesionales en más de 190 países y territorios para tratar de garantizar a los niños y las niñas el derecho a sobrevivir y a desarrollarse desde la primera infancia hasta la adolescencia. UNICEF, que es el mayor proveedor de vacunas para los países en desarrollo, trabaja para mejorar la salud y la nutrición de la infancia; el abastecimiento de agua y saneamiento de calidad; la educación básica de calidad para todos los niños y niñas y la protección de los niños y las niñas contra la violencia, la explotación y el VIH/SIDA. UNICEF está financiado en su totalidad por las contribuciones voluntarias de individuos, empresas, fundaciones y gobiernos.