Derrota del equipo femenino ante el Unicaja (59-40) en el primer asalto de su serie de cuartos de final y contundente triunfo del cuadro masculino ante el onubense Aljaraque (92-64) en la ida de octavos.
Fin de semana de contrastes para el Club Náutico Sevilla en las eliminatorias por el título del sector andaluz de Primera Nacional de baloncesto, en la que están inmersos tanto su primer equipo femenino como el masculino. Las primeras iniciaban su cruce de cuartos de final, programado al mejor de tres encuentros, frente al Unicaja de Málaga, que en la tarde de este domingo confirmaba los pronósticos y se llevaba la victoria en el Pabellón Los Guindos por 59-40 (31-23 al descanso).
A pesar de todo, el equipo sevillano ha mostrado una imagen bien distinta respecto a los encuentros disputados frente a las costasoleñas en la primera fase liguera. De hecho, las diferencias nunca fueron insalvables, como lo demuestran los distintos parciales (21-14, 10-9, 14-6 y 14-11).
Todo ello invita al optimismo al equipo dirigido por Andrés Bejarano de cara al segundo encuentro de la eliminatoria, fijado para el próximo sábado en tierras sevillanas y en el que confían en alargar la serie al tercer asalto.
Por su parte, el equipo masculino del Club Náutico ha dado un paso de gigante de cara a su clasificación para los cuartos de final tras superar en el encuentro de ida de octavos al onubense P.M.D. Aljaraque por un sorprendente 92-64. Los hispalenses se llevan de esta forma un nutrido colchón de 28 puntos de cara al encuentro de vuelta, a celebrar en la provincia vecina el próximo domingo en la matinal.
Los de Jonatan Domínguez, séptimos de grupo en la primera fase, desarbolaron a su rival, subcampeón del otro grupo en la liguilla previa del campeonato, en un partido casi perfecto. Y es que al final del primer cuarto la renta local ya era de 17 puntos (25-8), ampliándose a los 27 al descanso (53-26).
Aunque las rentas se ampliaron incluso en el tercer cuarto (77-47), los náuticos no perdieron la compostura ni acusaron el cansancio en los últimos minutos para llevarse la victoria con una jugosa renta que invita a mirar seriamente a la siguiente ronda de no mediar debacle en la vuelta.