La memoria del barrio del Arenal de Sevilla, las caras de sus protagonistas, los oficios que dan vida y sentido a sus gentes, están retratados en un libro, La Danza de los Sentidos, elaborado de forma artesanal a partir de la mirada de tres fotoperiodistas, tres mujeres, que han crecido profesionalmente atravesando una y mil veces las puertas de la Maestranza.
Conchitina Andrés, Esther Lobato y Cristina Quicler, firmas las tres reconocidas por sus trabajos durante dos décadas en la prensa hecha desde Sevilla, presentaron este miércoles, 21 de abril, el libro que recopila una selección de los retratos tomados en el entorno de la plaza de toros, con textos de Marisa Recuero y Ana García Romero.
La obra es un homenaje a la Maestranza "y a las personas que han dedicado y dedican sus vidas a sostener este legado cultural e histórico que actualmente es también un importante motor económico de la ciudad", subraya Antonio Pulido, presidente de la Fundación Cajasol, que edita el volumen y en cuya sede se celebró la presentación, conducida por Marina Bernal y en la que estuvieron presentes los diestros Curro Romero y Pablo Aguado, el periodista Carlos Herrera, el empresario de la plaza de toros Ramón Valencia, o el director de EL MUNDO, Francisco Rosell.
Presentación de La Danza de los Sentidos, en el patio de la Fundación Cajasol.
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Herrera, que prologa la obra con un texto, recuerda que el Arenal era "la puerta abierta que España utilizaba para viajar a las Indias y, si había suerte, para volver de ellas con la carga histórica que hizo de Sevilla la capital del mundo por aquellos años. Si Sevilla era Nueva York, El Arenal era Manhattan".
Por las páginas de La Danza de los Sentidos se pasean desde los areneros o los muleros de la plaza hasta los taquilleros y o los músicos de la Banda del Maestro Tejera. Porque el libro es un catálogo de personajes pero también de sagas y de herencias familiares, con las que se transmite el oficio pero sobre todo la pasión en el empeño de mantener viva la tradición.
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