Legado. Rocío Jurado hubiera cumplido hoy 77 años. Dos libros casi simultáneos honran su memoria y su vínculo con una ciudad, veraneo de sevillanos, a la que dio proyección mundial
FRANCISCO CORREAL18 Septiembre, 2021
Rocío Jurado (1944-2006) habría cumplido hoy 77 años. La editorial Sevilla Press le ha hecho un doble regalo a su memoria y a su legado. Dos libros que salieron de forma casi simultánea: Chipiona. Un paraíso cercano y Regla de Chipiona, de los que son autores Marina Bernal y Miguel Gallardo, respectivamente, dos sevillanos que hacen vida de barbecho entre su ciudad natal (y profesional) y Chipiona, de la que ya son vecinos adoptivos. En ambos libros, la cantante chipionera tiene una presencia destacada. Marina Bernal, en su recorrido histórico y antropológico por la localidad gaditana, destino veraniegos de tantísimos sevillanos con su propia calle Sierpes, se detiene en el número 11 de la calle Calvo Sotelo (hoy calle Larga) donde el 18 de septiembre de 1944 vino al mundo Rocío Mohedano Jurado, muy cerca de la antigua huerta de Joselito el Francés donde jugaría de niña. Unos meses antes se produjo el desembarco de Normandía. Un mes después de su nacimiento los aliados entraban en Alemania. Una mujer de paz hasta en su cronología.
En el libro Regla de Chipiona, Miguel Gallardo cuenta que la chipionera le dedicó una canción a su Virgen, Virgen de Regla, incluida en su disco Con las alas al viento. Marina Bernal ya le dedicó otro libro, Canta, Rocío, canta... título inspirado en un poema que le dedicó Rafael Alberti (1902-1999), poeta de El Puerto que cumplía años el mismo día que Miguel Gallardo.
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No son los únicos libros en los que se habla de Rocío Jurado. Tuve la suerte de regalarle en persona sendos ejemplares de las novelas Nubosidad variable, de Carmen Martín Gaite, y Los tornadizos, de Antonio Cascales, en las que aparecen referencias a la artista, también presente en el libro Los últimos días de la izquierda, de Felipe Alcaraz, que termina en una bodega de Chipiona. En este libro uno de los personajes comenta que en una televisión estatal le preguntaron a la diputada Teresa Rodríguez por dos personajes que hubieran influido en su vida "y Teresa respondió que su madre y Rocío Jurado".
Estos dos libros sobre Chipiona han aparecido con el regreso a la Alcaldía de un dinosaurio municipal, Luis Mario Aparcero, que organizó en su localidad un homenaje a Alberti, entrevistado entonces por una jovencísima Marina Bernal. Coincide este doble homenaje libresco a Chipiona con la reivindicación que el alcalde ha hecho para su población de la desembocadura del Guadalquivir, lo que obligaría a reescribir el ritual de la partida de las naves que salieron en agosto de 1519 del puerto de las Mulas de Sevilla. ¿A Sanlúcar, a Chipiona?
Chipiona no fue municipio independiente hasta 1477, quince años antes del descubrimiento de América. Un hito de 1492 en cuyo quinto centenario destacó Rocío Jurado. Un auditorio construido por Eleuterio Población lleva su nombre. Formó parte con Imperio Argentina, Juanita Reina, Nati Mistral y María Vidal del elenco de Azabache, el proyecto cultural de mayor recorrido de cuantos pasaron por la Cartuja, amén de la fibra óptica, los móviles o el microclima.
La desembocadura es parte de su historia. Sancho IV le otorgó a Guzmán el Bueno la franja territorial entre las desembocaduras del Guadalquivir y el Guadalete, con el compromiso de construir tres castillos en esa zona. Marina Bernal hace un recorrido por los catorce kilómetros de playa de Chipiona, la primera la de Montijo, la más próxima al refugio de Caballero Bonald (1926-2021) en su casa de Los Gallos; sus nueve corrales de pesca, una veintena de inmobiliarias, y tres bodegas de moscatel. El año próximo es el centenario de una de ellas, la Cooperativa Católica Agrícola, creada por el padre Francisco de Lara y Araujo, arcipreste de Sanlúcar de Barrameda.
En ambos libros se cuenta cómo se protegió el patrimonio monumental de Chipiona del terremoto de Lisboa de 1755 y de otro seísmo, la desamortización de Mendizábal de 1835. Cuenta con el faro más alto de España, construido entre 1863 y 1867 por el ingeniero Jaime Font. Además del veraneo, hay muchos vínculos con Sevilla. Los arquitectos Cruz y Ortiz diseñaron las oficinas del Puerto Pesquero, que data de 1935. El cardenal Bueno Monreal, natural de San Fernando, consagró el nuevo santuario de Regla en 1906, meses antes de su muerte. Fue párroco de San Lorenzo. Miguel Gallardo, abogado, periodista, historiador del básket sevillano, es hermano de la Soledad de San Lorenzo. El cardenal Segura coronó a la Virgen de Regla en 1954. Su devoción se extiende por todo el mundo, incluida Lapu-Lapu City, localidad de la isla de Cebú que lleva el nombre del caudillo filipino que acabó con la vida de Magallanes, el navegante que salió con las cinco naves de Sanlúcar de Barrameda… o de Chipiona.