La Hospitalidad Diocesana de Sevilla Lourdes ha encendido en la Gruta de Lourdes, ante la Virgen, un cirio por los Donantes de Órganos. El objetivo era doble: rezar por quienes nos dejaron regalando vida y lograr una mayor concienciación hacia este tema tan delicado y cristiano.
El cirio llevaba escrita la leyenda LÁGRIMAS DE VIDA: Lágrimas de los enfermos que esperan seguir viviendo gracias a un trasplante o lágrimas por la muerte de un ser querido, se convierten en Esperanza y Vida con las Donaciones de Órganos. Con los trasplantes muchas personas enfermas, con una muerte anunciada, pueden disfrutar de una segunda oportunidad en la vida.
El cirio fue encendido y bendecido en la mañana del 28 de Junio durante la Eucaristía ofrecida ante numerosos peregrinos por Monseñor D. Antonio Ángel Algora Hernando, Obispo de Ciudad Real, siendo depositado posteriormente en la Gruta.
El mensaje Lágrimas de vida está copiado del título de un libro escrito por una madre, Susana Herrera, tras la pérdida accidental a su bebé. La donación de sus órganos fue un bálsamo para su herida y ahora se siente madre de las tres niñas que se salvaron al tener la oportunidad de trasplantarse.
Nuestro Arzobispo, Monseñor Asenjo, en su Carta Pastoral titulada La donación de órganos, un modo nuevo de vivir la fraternidad afirma que estamos ante un acto sublime de Amor al Prójimo. También dice que para nosotros los cristianos, el ejemplo supremo de donación es Jesucristo y que "nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos" (Jn 15,13).
La Luz de este cirio iluminará nuestros corazones y colaborará para que nuestra sociedad sea más sensible con las donaciones de órganos, ofreciendo Esperanza a los enfermos de las listas de espera que con sus trasplantes pueden volver a nacer.