El Sevilla venció ayer al Málaga en La Rosaleda por 1-2 con tantos de Alfaro y Martín Cáceres para los de Nervión. El derbi andaluz se puso favorable para los malagueños gracias al gol del venezolano Rondón, pero Alfaro, que sustituía al lesionado Navas, y Martín Cáceres le dieron la vuelta al marcador antes del descanso. En la segunda parte el Málaga pudo llegar al empate pero el meta Palop evitó el desastre para un cuestionadísimo Antonio Álvarez.
El derbi andaluz era un examen final para el técnico del Sevilla Antonio Álvarez. El conjunto de la capital hispalense había perdido entre semana en la Europa League frente al Paris Saint-Germain (puede que finalmente le den los tres puntos al Sevilla por alineación indebida de los franceses), lo que sumado a la decepción de la previa de la Champions league dejaba en el punto de mira al técnico sevillano. Por su parte, el Málaga quería estrenar su casillero como local, ya que en la primera jornada perdió frente al Valencia en casa.
El encuentro no comenzó muy positivo para los de Álvarez, quienes antes del cuarto de hora de partido ya habían encajado el primer gol. A la salida de un córner el central Kris se encontró con Palop, pero el rechace del meta valenciano le cayó franco a Rondón para hacer el primero tanto del derbi andaluz. El gol ponía contra las cuerdas al Sevilla y sobre todo a su técnico, el cual se mostraba nervioso en la banda por la que le podía caer encima. Por fortuna para Antonio Álvarez, un inspirado Perotti puso, tan solo cinco minutos después, un balón al área que remató en el segundo palo el canterano Alfaro, jugador que hizo de Jesús Navas en la noche de ayer.
A partir de ahí el Málaga se fue diluyendo y el conjunto de Nervión se metió de lleno en el partido, llegando casi todas las oportunidades por la banda izquierda con un soberbio Perotti. El argentino llegaba con mucha facilidad y, aunque el tanto de Martín Cáceres no llegó hasta el tiempo de descuento de la primera mitad, las ocasiones se sucedieron sobre la portería del brasileño Galatto. En la segunda mitad el Málaga apretó un poco más, pero en todas sus internadas sobre área sevillista se encontró con el buen hacer de Andrés Palop quien, a pesar de tener días malos, sigue demostrando que es un portero de garantías.
El Sevilla pudo sentenciar en el segundo acto con una gran acción de Álvaro Negredo, pero su disparo se estrelló contra el poste. Al final, victoria sevillista que le coloca segundo en la tabla clasificatoria y a la espera de que la UEFA le de los tres puntos por lo sucedido ante el PSG. Por su parte, el Málaga se queda decimocuarto teniendo que visitar entre semana al complicado Getafe.