
El Viernes día 1 de Noviembre, la imagen del Crucificado del Buen Fin, de Roque de Balduque, presidio la Misa de Todos los Santos difuntos a las 11 de la mañana en el cementerio de San Antonio, de la ribereña localidad sevillana de Alcalá del Río. Para la cual fue trasladado en su paso procesional de Semana Santa, desde su sede en la Parroquia de Sta. María de la Asunción, hasta el campo santo Ilípense. Esta salida extraordinaria se enmarca dentro de los actos con motivo del año de la fe, que es el pretexto para un acto de evangelización, que clausurara el Papa Francisco el próximo mes de noviembre, en la fiesta de Cristo Rey del Universo. La procesión partió a las 9:00 horas de dicha parroquia, con la Cruz Parroquial flanqueado por dos ciriales, que abría un cortejo, con un grupo de hermanos con cirios blanco, de la Asociación de Fieles de la Pro-Hermandad cristifera del buen Fin. A continuación el estandarte con vara de la representación corporativa, seguido de la presidencia y varios monaguillos incensado junto al paso del Stmo. Cristo, que llevaba un exorno floral de claveles rojo. Al mando del martillo, los capataces José Romero Romero y José Manuel Coello Vázquez con su grupo de capataces auxiliares. La Santa Misa se celebro en la puerta del Campo Santo presidido por el paso del Cristo, donde acudieron numerosas persona del municipio Ilípense y las representaciones de las Hermandades penitenciales de la localidad. La Santa Misa litúrgica fue Presidida y predicada por el nuevo Vicario Episcopal de la zona pastoral Norte de Sevilla Oscar Díaz Malaver, Párroco de la Iglesia de la Purísima Concepción de la localidad sevillana de Brenes, y concelebrada por el sacerdote Fernando Reyes Rico, párroco de la localidad.
Fotografía Antonio Rendón Domínguez

