
La Delegación de Cultura del Ayuntamiento de Chipiona ofrecerá en la sala de exposiciones temporales del Castillo desde el viernes 21 de marzo la muestra itinerante ‘Blas de Lezo. El valor de mediohombre’, organizada por la Secretaría General Técnica del Ministerio de Defensa, a través de la Subdirección General de Publicaciones y Patrimonio Cultural.
Compuesta por 26 paneles distribuidos en ocho diferentes bloques, la exposición, que podrá visitarse de lunes a viernes de 10:00 a 14:00 horas hasta el 1 de abril, tiene como objetivo promulgar y promover la cultura de defensa, y en este caso concreto, dar a conocer por toda la geografía nacional la figura y recuperar la memoria de uno de los marinos más importantes de nuestra historia naval, contribuyendo de esta manera a difundir el rico patrimonio histórico cultural militar español.
Está organizada en base a paneles fotográficos que reproducen diversos momentos de la propia historia: la vida del marino, su trayectoria en el marco de la primera mitad del siglo XVIII, la guerra de sucesión y la batalla de Cartagena de Indias.
Blas de Lezo nació el 3 de febrero de 1689 en Pasajes de San Pedro, Guipúzcoa. Ingresó en la Marina con 15 años y destacó por su coraje y valor en la guerra de Sucesión donde se forjó como militar. Participó en los principales episodios del conflicto y con solo 23 años ascendió a capitán de navío. A los 25 años ya era cojo, tuerto y manco por las heridas recibidas en combate que le valdría para el apodo de Mediohombre. Destinado en la escuadra del Mar del Sur, luchó contra la piratería en las costas de Chile y Perú y en la defensa de los territorios ultramarinos. Posteriormente al mando de la escuadra del Mediterráneo participó en expediciones de Génova y Orán al frente del Departamento de Cádiz donde alcanzó el empleo de teniente general, la más alta graduación en la Armada. Además, en 1.736 asumió la defensa de Cartagena de Indias defendiéndola en 1.741 con un número de hombre muy inferior frente a Londres ganando la batalla y a pesar de ello siendo apartado de su puesto. Murió en 1.741 y fue enterrado en una tumba de emplazamiento desconocido. Colombia lo recuerda como un héroe y la Armada honra su memoria con el buque fragata F103.

